¡La llegada de un au pair es un momento emocionante! Antes de volar, deben llevar consigo el pasaporte y otros documentos por si los necesitan en el país de acogida. Deben alinear sus horarios de viaje con sus padres de acogida y discutir cómo llegarán a su nueva casa desde el aeropuerto. Los padres de acogida deben hacer que la habitación de su au pair sea lo más cómoda posible. Considera la posibilidad de tener la cama hecha y algunos artículos de aseo esenciales para su llegada, de modo que puedan relajarse e instalarse cuando lleguen a la casa.
Una vez en el país de acogida, la au pair debe hacer todos los trámites necesarios para empadronarse en su nueva ciudad. Algunos de estos pasos pueden ser programar citas para los datos biométricos, registrarse en su dirección, recoger una tarjeta de residencia, abrir una cuenta bancaria u obtener un nuevo plan de teléfono.
Llega una nueva au pair a tu casa, ¡qué emoción! Si es tu primera au pair, puede que tengas algunas preguntas sobre qué hacer para prepararte para cuando llegue la au pair. Preparar totalmente la habitación para la au pair es un buen comienzo, con algunas cosas básicas como artículos de aseo, marcos de fotos y todos los elementos necesarios, como ropa de cama, toallas y tener todos sus muebles limpios y organizados.
Normalmente a la familia anfitriona también le puede gustar tener un pequeño regalo para introducir a la au pair en vuestra cultura, como una golosina tradicional o un recuerdo. Hará que la au pair se sienta cómoda y bienvenida en tu (y en su nuevo) hogar.
Es posible que la au pair necesite un tiempo para adaptarse a una nueva zona horaria y a un nuevo entorno, así que programa algo de tiempo libre para relajarse cuando llegue por primera vez antes de sus horas de trabajo. Considera la posibilidad de organizar algunas actividades familiares para que la au pair empiece a sentirse parte de la unidad familiar y todos puedan estrechar lazos. Comparte información sobre la zona y la cultura locales para que pueda comprender el entorno.
Ahora es un buen momento para empezar las reuniones mensuales, en las que podéis hablar de los progresos, las expectativas y cualquier otra pregunta o preocupación. La primera será una buena ocasión para conoceros y también para repasar las normas de la casa. La llegada de la au pair es un gran paso para los dos, así que intenta ser tú mismo y recibir a la au pair con los brazos abiertos.
